Conoce la historia de la casa en el gueto de Varsovia y la lucha por la supervivencia en medio de la barbarie
El Gueto de Varsovia fue un lugar muy triste. Los nazis, que eran malos, obligaron a los judíos a vivir juntos en un espacio muy pequeño. Era como una cárcel gigante. La gente tenía que vivir en casas muy pequeñas, sin comida, sin agua y sin medicinas. Era un lugar muy difícil para vivir.
En este lugar, había mucha gente. Eran judíos que los nazis habían sacado de sus casas y los habían puesto en el gueto. Había muchas familias que vivían juntas en un solo cuarto, sin privacidad. Muchas personas enfermaban y morían de hambre o de enfermedades.
Pero a pesar de todo, la gente del gueto no se dio por vencida. Se ayudaban unos a otros, compartían lo poco que tenían y trataban de vivir con esperanza. Algunos artistas y escritores incluso creaban obras de arte para que la gente no perdiera la fe.
Sin embargo, el gueto de Varsovia no duró mucho. Los nazis decidieron destruirlo y mataron a la mayoría de los judíos que vivían allí. Fue una tragedia terrible.
Hoy en día, el gueto de Varsovia es un lugar de memoria. Se puede visitar y ver los restos de lo que fue. Es importante recordar lo que pasó allí para que no vuelva a suceder nunca más.
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